Este artículo del dierio El País del día 4 de Abril cuenta la noticia de un pueblo italiano llamado Foggia en el que se han implantado autobuses exclusivamente para el uso de los inmigrantes. Ha sido una decisión del jefe de la policía, que como en la mayoría de los paises depende del Ministerio del Interior. Se trata de una línea en particular, la 24, que parece ser conflictiva ya que es la que llega al recinto que el gobierno italiano a dispuesto para que se alberguen las más de 800 personas que reclaman asilo.
Al parecer en esta líne
a de autobuses se juntaban extranjeros y locales y se probocaban altercados, entonces qué mejor solución que SEPARARLOS!!!!!Aunque el gobernador de la localidad se opone a la medida, al alcalde de centro-izquierdas le pareció fantástica. Asimismo, la ONU, a través del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en Italia, ha defendido el servicio y considera que no es discriminatorio.
Interesante no?
Pues a mí, con esto de los autobuses, se me vino a la cabeza esa historia de una mujer negra (Rosa Parks), que a mediados de los años cincuentas, en Estados unidos, cuando los autobuses tenían asientos reservados para blancos, se sentó en uno de estos y no se lo cedió a un hombre blanco. Gracias a este hecho, entre otros, se generó todo un movimiento pro derechos civiles igualitarios tanto para blancos como para negros, que durante más de una década logró grandes cambios en la, hasta entonces, y ahora menos, segregadora sociedad estadounidense.
Desde entonces hasta ahora se han dado grandes avances en la lucha por la igualdad, tanto de "raza" como de género, sin, por supuesto, haber llegado a la meta aún, se podía pensar que casos como el de autobuses separados no volverían a ocurrir. Hasta hoy.
Uno tiende a pensar que hay cosas que no podrían volver a pasar.
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